"Basta un poco de espíritu aventurero para estar siempre satisfechos, pues en esta vida, gracias a Dios, nada sucede como deseábamos, como suponíamos, ni como teníamos previsto". (Noel Clarasó)

viernes, 8 de julio de 2011

Otras yerbas...

Cuando estaba en la escuela secundaria, tenía una profesora de Derecho que nos daba miedo.

Desde su manera de entrar al aula, siempre cargada de gruesos libros, una cartera enorme, y su otra mano
ocupada con una taza de café, hasta su imponente presencia física.

Ella era alta para todos, pero creo que sobre todo para mi.

Y solia usar mucho esa frase ..y otras yerbas... cuando no quería especificar algo que incluía muchas cosas para nombrar...

Una frase que viene a mi mente hoy, casi dos años despues de la última vez que subí algo a este blog, y mas bien como una excusa por mi ausencia.

Tal vez deliberada. Tal vez expresamente negligente...

¿Que hice en todo este tiempo?

Es la pregunta que me sorpendo haciendome ahora, al abrir este blog abandonado despues de tanto tiempo y solo para descubrir  este hermoso comentario en mi propuesta... (Gracias lob, tarde un buen rato en darme cuenta que eras vos...)

Una que presenté y nunca llegué a escribir...

¿porque tal vez solo me estaba dedicando a vivirla? ¿y eso vale como excusa suficiente?

¿Haber estado tanto tiempo perdida y ocupada en "otras yerbas" como para ni siquiera recordar
que me habia propuesto escribir sobre la vida...?

Tal vez si...

Tal vez necesité todo este tiempo para finalmente madurar la idea...

Pero mi conciencia, siempre demasiado exigente, me dice que no. Que este es solo otro de los tantos
compromisos que asumí conmigo misma para no cumplir...

Aunque "confieso que he vivido" y mucho en este tiempo.

Unos meses despues de subiera el ultimo post, volvi a a reunirme con mis amigas para festejar un objetivo
cumplido a destiempo para mi.

Porque graduarse en la universidad casi ocho años despues de lo previsto es algo... tarde.

Pero ¿que importa el tiempo si al final el objetivo se logra?


y tal vez preguntarlo asi no sea otra cosa que una excusa vana para calmar una mente que se reprocha la nada
en que se ha convertido...

Pero, por otro lado, es inevitable sentir que  la satisfaccion de la meta cumplida nos hace dar cuenta de que no importa cuanto tiempo nos haya llevado al final. Llegar a la meta no se compara con nada.

Todas las esperas valen a final del camino.
Todo el tiempo "perdido" siempre termina siendo "tiempo invertido" cuando lo contemplamos desde la meta, porque el balance nos agrega ese plus exclusivo del SER HUMANO.

Uno cambia, crece, madura, envejece mientras el tiempo transcurre en esa espera,con los pasos  en el camino hacia algo.


Y sin embargo, para otras cosas el tiempo es demasiado importante...

¿En que he "perdido" el tiempo entonces? me pregunto,

y mas bien lo hago para poder responder aqui, a quien tal vez solo pretendia saber que era eso tan importante
de lo que me proponia hablar...

He perdido el tiempo viviendo...

He perdido el tiempo cambiando mi mente para poder entender algunas cosas,

He perdido mi tiempo tratando de que lo que me impulsen sean desiciones,  y no resignaciones a los cambios de rumbo.

Tan inesperados siempre.
Nunca como uno los habia planeado en un comienzo... nunca como los habia previsto...


 Mi rumbo ahora incluye otras metas...

y si paso revista a las "otras yerbas" que me mantienen distraida viviendo, me doy cuenta de que

valen lo suficiente como para justificar esta negligencia. y de que es hora de empezar a hablar de ellas...

No hay comentarios:

Publicar un comentario